Jon Rahm (-27) brillante vencedor del Torneo de Campeones de Hawai

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Jon Rahm (-27), en la imagen, se ha proclamado brillante vencedor del Sentry Tournament of Champions, tras firmar una última tarjeta de diez golpes bajo el par 73 del Plantation Course at Kapalua, en Hawai. Collin Morikawa (-25) acabó segundo.

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Jon Rahm (-27) se ha proclamado brillante vencedor del Sentry Tournament of Champions, tras firmar una última tarjeta de diez golpes bajo el par 73 del Plantation Course at Kapalua, en la isla hawaiana de Maui, donde finalizó el domingo 8 de enero, el primer torneo del año del PGA Tour. Con cuatro tarjetas de 64, 71, 67 y 63, el español acabó con el dominio de Collin Morikawa durante las tres primeras jornadas y, gracias a sus extraordinarios diez golpes bajo el par de la última jornada, acabó con dos golpes de ventaja sobre el norteamericano, que partía claro favorito y con siete golpes de ventaja sobre el de Barrika. El norteamericano (64, 66, 65 y 72) no pudo con la presión de la última jornada y, mientras Jon no paraba de hacer birdies, Morikawa solo pudo terminar con un golpe bajo el par del campo y conformarse con la segunda posición.

Y es que nada podía parar al vasco que empezó con un bogey en el hoyo 1, pero continuó con una racha de cinco birdies en la primera parte del recorrido y finalizó con otros cuatro birdies y un eagle, en el par cinco del hoyo 15, con lo que acabó con las esperanzas del norteamericano y de todos sus perseguidores. En la tercera posición (-23) empataron otros dos norteamericanos, Tom Hoge y Max Homa.

UNA VICTORIA IMPRESIONANTE

Después de abrir el año en el Torneo de Campeones, con una magnífica tarjeta de 64 golpes, nueve bajo el par 73 del Plantation Course, Jon Rahm no logró mantener el mismo nivel y el viernes, en la segunda jornada, su progresión no fue la esperada; con 71 golpes frenó su actuación y descendió (-11), a la sexta posición. El sábado, en la «ronda del movimiento», sus 67 golpes, le dejaban, con un acumulado de -17, en una muy honrosa quinta plaza, empatado con el joven coreano Tom Kim, con el que saldría en el tercer partido, antes del estelar, la cuarta jornada de este Torneo de Campeones.

Los dos jugadores estaban a siete golpes de Colin Morikawa, lo que parecía una distancia insalvable, de cara al triunfo final. El norteamericano (64, 66, 65), con un acumulado de -24, tenía seis golpes de ventaja sobre sus tres inmediatos perseguidores, el inglés Matthew Fitzpatrick, con el que jugaba el partido estelar del domingo 8, y dos compatriotas: Scottie Scheffler y J.J. Spaun (-18), que compartían el penúltimo partido.

Esta prueba, en la que participaban 39 ganadores en la pasada temporada -Xander Schauffele se retiró el viernes por problemas en su espalda-, unidos a algunos de los finalistas del Tour Championship, es uno de los doce torneos del circuito americano a los que se ha añadido la categoría de «mejorados», o «designados», con una importante subida en su montante en premios, igual o superior a la de este de Campeones que reparte 15.000.000$, con 2.000.700$ para el ganador.

Este ha sido uno de los intentos del PGA Tour para competir con el LIV Tour saudí, aunque por mucho que aumenten los premios, no llegan ni a la mitad de lo que logra un profesional por ganar un torneo pagado por el Gobierno/Estado Saudí. No es en los dólares donde está la lucha; el circuito norteamericano tiene que luchar contra los creadores de los Globetrotters del golf, sino en la organización, en la base de miles de jugadores que inician una profesión desde niños para llegar a ser jugadores, o en el PGA, el DP o el LIV, pero esa es la fuerza de los circuitos estables, creados hace muchos años.

DOS AUSENCIAS NOTABLES

Este clásico torneo de campeones tenía dos ausencias notables. La primera, la de Rory McIlroy, número 1 del ranking mundial, que no solo ha declinado su presencia en la primera prueba del año en el PGA Tour, circuito que ha defendido a capa y espada hasta ahora, arremetiendo incluso con duras críticas al LIV Tour y a sus dirigentes (Ver más información en esta misma web), sino que ha cambiado de actitud y ahora pide que los responsables de ambos circuitos se sienten a dialogar.

Además de la ausencia de McIlroy, también se constataba la del defensor del título, el australiano Cameron Smith, que el pasado año se embolsó la cantidad de 1.476.000$ y que, enrolado en las filas del LIV Tour, está «castigado» por el circuito norteamericano, aunque sigue siendo el tercer jugador del ranking mundial. La pasada temporada venció, además de en este torneo de campeones en Hawai, The Players y The Open… Ahí es nada.

LA OCTAVA VICTORIA DE RAHM

Jon Rahm pudo, por fin, levantar el trofeo de esta prueba de campeones, donde había terminado segundo en 2018 y 2022. La del pasado año el español acabó con 33 golpes bajo par, un resultado mejor que el de esta edición de 2023, pero que solo le sirvió para quedar por detrás del australiano Cameron Smith -ausente esta temporada, como queda dicho- que terminó con 34 golpes bajo par.

Esta vez, con «solo» 27 golpes bajo par, Rahm ha logrado su octava victoria en el PGA Tour, y la más importante tras el US Open de 2021, su primer y único grande. Pero Rahm ha empezado a escribir una historia interminable para el golf español, tal y como se escribe en el romance que se publica en esta misma página web.


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