Tiger: «mira mamá… sin dientes»
Tiger Woods perdió un diente al ser golpeado, sin querer, por un cámara que filmaba a la novia del golfista, premiada en Italia al ganar una prueba de esquí alpino.
No corren buenos tiempos para Tiger Woods. Desde 2009 parece que le ha mirado un tuerto. Todo aquel asunto con su mujer, que ya ha prescrito en la memoria del golfista y de sus seguidores, se ha visto perseguido por una serie de desgracias en forma de lesiones que le han hecho perder, no solo el número 1 del ranking mundial de golf, sino todo aquel carisma que le llevaba a toda prisa a igualar, si no a superar el record de 14 Majors en poder de Jack Nickaus.
Ahora, el Tiger enamorado ha vuelto a padecer las consecuencias de sus relaciones -en este caso colaterales- con la prensa. Y no con la escrita, porque si un periodista le hubiera dado con una pluma en la cabeza, no habría pasada nada, pero si lo hace un cámara, las consecuencias son mucho peores.
El caso es que Tiger estaba en Italia acompañando a su novia, la esquiadora, también norteamericana, Lindsey Vonn, que batió el récord histórico de triunfos en la Copa del Mundo de esquí alpino, cuando durante la entrega de premios un cámara que buscaba la mejor posición posible para grabar e acto, golpeó, sin querer al golfista con su cámara y le rompió un diente. Por fortuna, sin consecuencias graves, y nada que no se arregle con un buen odontólogo. Claro que por ahora, de besar a la novia, nada. Recuerdan aquel chiste del niño que iba en bicicleta y presumía con su madre de que bajaba las cuestas sin manos… «mira mamá, sin manos»… «mira mamá, sin dientes». Más o menos.
Tiger Woods que se ha tomado unas largas vacaciones y que sigue entrenando a todo meter, debutará en la temporada 2015 el 29 de febrero en el torneo de Phoenix. El estadounidense, número 24 del ranking mundial, se prepara para iniciar una nueva temporada ya recuperado de sus molestias físicas. Se operó de la espalda el 31 de marzo del año pasado y se perdió el Masters de Augusta y el US Open. Para finales de febrero seguro que volverá a recuperar su sonrisa de siempre, con todos los dientes tan blancos y perfectos como si fuera a hacer un anuncio del dentífrico de moda.
El ex número 1 del mundo regresó en junio pasado, pero volvió a dejar la competición después del PGA Championship en agosto. Sólo jugó ocho torneos en 2014 y únicamente en tres ocasiones completó los 72 hoyos.
