Johnson ganó el US Open. Sergio, otra vez top cinco
Sergio García, al par, perdió el US Open a partir del hoyo 14 de Oakmont. Dustin Johnson (-4), en la foto, justo vencedor.
Sergio García, al par, perdió el US Open a partir del hoyo 14 de Oakmont, en la última jornada del segundo Major del año, el domingo 19 de junio. Dustin Johnson (-4), justo vencedor, con tres golpes de ventaja sobre el trío formado por Jim Furyk, Shane Lowry, que salió líder en la cuarta jornada, con cuatro golpes sobre Dustin Johnson, pero que no pudo con la responsabilidad de los nueve últimos hoyos del complicado Oakmont G.C. (par 70), cerca de la localidad de Pittsburg, en Pennsylvania, donde se disputó el torneo.
Dustin Johnson ganó conn brillantez, a pesar de jugar los últimos hoyos del recorrido con la amenaza de ser penalizado con un golpe si, al final del torneo, los jueces que habían visto como se movía su bola en el green en uno de los hoyos finales, consideraban que el norteamericano había sido culpable de ese movimiento.
A pesar de que Lee Westwood, su compañero y marcador, aseguró que la culpa no era del norteamericano, los jueces penalizaron a Johnson, aunque al final del partido, en una actitud totalmente ilógica -si hubiera habido penalidad tenían que habérselo comunicado en el momento, y no amenazarle con hacerlo al final del partido, con lo que eso significa para la mentalidad de un jugador que está luchando por ganar su primer Grande.
Esas decisiones totalmente erróneas de los jueces -«no me amenaces»- así como considerar el campo de Oakmont, dividido en dos por una autopista y lleno de trampas, el mejor escenario para un US Open, dejan a los responsables de la USGA, con el trasero al aire, digo yo.
Los cuatro jugadores citados fueron los únicos capaces de ganarle al campo, después de cuatro jornadas. En la quinta posición, al par, acabaron empatados Sergio Gacía y el sudafricano Branden Grace.
Una vez más, Sergio (68, 70, 72 y 70) se atascó al final. Lo cual no significa que el español no hiciera un magnífico torneo. Todo parecía indicar que el castellonense iba decidido hacia el triunfo, especialmente después de embocar desde el bunker, un birdie en el par 3 del hoyo 13, con lo que se colocaba -3, a tiro de piedra de la cabeza. Sin embargo, los tres bogeys consecutivos en los hoyos 14, 15 y 16, le dejaron fuera de combate. Y fueron los tres putts del 14, uno de los hoyos más asequibles, que no fáciles del campo, los que iniciaron la marcha atrás del castellonense que, una vez más, insisto, jugó su mejor golf durante la prueba, a excepción de esos tres bogeys que le enviaron a la quinta posición.
Pero ahí está. Seguro que lo consigue y no a mucho tardar.
EL DEBUT Y LA DESPEDIDA DE JON RAHM
Jon Rahm debutaba, como amateur, en el US Open, y se despedía de su condición de aficionado para empezar su andadura en el PGA Tour como profesional esta misma semana, a partir del jueves 23, en el torneo de Tiger, en Maryland.
Y el español presentó sus cartas credenciales con un magnífico resultado de +7, con cuatro tarjetas de 76, 69, 72, 70, para terminar en el puesto 23, empatado con un nutrido grupo de profesionales, entre los que se contaban los dos sudafricanos ganadores de Grande, Louis Oosthuizen y Charl Scjhwartzel.
Una esperandora aventura es la que tiene por delante el joven vasco, de 21 años, al que le sobró el 76 de la primera ronda, producto, posiblemente, de los nervios del debut.
En cuanto a Rafa Cabrera Bello, el tercero de los españoles en el US Open (74, 70, 69 y 75), acabó +8, en el puesto 32, empatado, entre otros, con Lee Westwood. Lástima el mal comienzo del canario, y sus cinco sobre par en la última ronda. De todos modos, su juego en Oakmont ha sido aceptable, válido para el PGA Tour, si es que decide jugar en América la próxima temporada,
SERGIO, SIEMPRE EN LA POMADA
Con la tercera jornada del US Open sin terminar, Sergio García (-2) es tercero, a tres golpes de Shane Lowry. Al irlandés (68, 70) le quedan cuatro hoyos para terminar la tercera vuelta, y tiene dos golpes de ventaja sobre el desconocido Andrew Landry (-3), que dejó el recorrido en el hoyo 13, y tres sobre el trío formado por Sergio, Dustin Johnson y Lee Westwood.
Las tormentas del jueves 16 trastocaron los planes de los organizadores y el viernes y el sábado los jugadores tuvieron jornadas maratonianas para, finalmente, no poder terminar la tercera vuelta. El domingo 19, a primera hora, finalizarán los que dejaron su vuelta al anochecer y, a primeras horas de la tarde, hora de Pennsylvania, volverán al tee de salida del difícil campo de Oakmont (par 70), cerca de la localidad de Pittsburg.
Precisamente Pittsburg, situada en la confluencia de los dos ríos que forman el Ohio, es conocida como la Ciudad del Acero, por ser una de las mayores ciudades industriales del mundo. Y el «Campo del acero», por su dureza, podría llamarse al Oakmont G.C., al que, después de casi tres jornadas de golf, solo seis jugadores han podido ganarle.
En cuanto a los dos primeros del mundo -con Rory fuera del fin de semana-, Jason Day (76, 69, 66) que tuvo un mal comienzo, ha sabido reaccionar y se ha colocado (+1) en la octava posición, empatado con Bryson Dechambeau, Daniel Summerhays y Zach Johnson.
No le fue tan bien a Jordan Spieth (72, 72, 70) que no ha parecido estar a gusto en ningún momento, y que ocupa el puesto 29 (+4), empatado con otros cinco jugadores: Matt Kuchar, Graeme McDowell, Russell Knox, Jim Furick y Martin Kaymer.
SERGIO, EN LA POMADA
García, que no pudo ni salir al campo el jueves 16, día del inicio del torneo, tuvo que juugar 36 hoyos el viernes acabó cuarto, a dos golpes de la cabeza. El español firmó 68 golpes, dos bajo el par del campo, lo que le dejó en cuarta posición empatado con el norteamericano Scott Piercy y con el irlandés Shane Lowry, a solo dos golpes de los colíderes, los también norteamericanos Dustin Johnson, con sus dos vueltas terminadas, y Andrew Landry, que jugó el jueves su primera ronda y como no pudo ni salir al campo en la segunda.
El español firmó 70 golpes en la segunda vuelta y ese par del campo le sirvió para ascender una posición. Y ahí está tercero, después de haber jugado 14 hoyos en la tercera ronda, en la que también va al par, a la espera de lo que suceda en otra jornada dura, como va a ser la del domingo 19, en la que participan los 67 jugadores que pasaron el corte tras las dos rondas iniciales, y que se estableció en +6.
CABRERA Y RAHM, EN EL FIN DE SEMANA
Los otros dos españoles participantes en el US Open lo están haciendo con muy buena nota, teniendo en cuenta los problemas que plantearon a los 156 jugadores que iniciaron el torneo, tanto la lluvia como la preparación del campo. Tanto Rafa Cabrera como Jon Rahm, el amateur vasco que se pasará a profesional en cuanto termine este segundo Major del año, se clasificaron para el fin de semana. Cabrera (74, 70, 69), con sus tres vueltas finalizadas, es el 21 (+3), mientras Rahm (76, 69, 72), que pagó la novatada en la primera vuelta, pero que supo recuperarse en la segunda y mantener el tipo en la tercera, es el 46, empatado con otros cuatro jugadores entre los que se encuentra Bubba Watson.
Puede parece que el puesto 46 no es para tirar cohetes, pero si se compara -y aunque las comparaciones sean odiosas, no hay otra manera de analizar la competición- con la cantidad de nombres relevantes que se han quedado fuera del corte, ese +7 del amateur español es un resultado para mostrarlo con la cabeza bien alta.
MICKELSON Y MCILROY, FUERA DEL CORTE
Los que han tenido que agachar la cabeza y volverse a casa para meditar sobre su juego en Oakmont han sido, entre otros grandes, Rory McIlroy, Phil Mickelson, Rickie Fowler, Justin Rose, Patrick Reed… y Henrik Stenson, que se retiró sin previo aviso.
LAS TORMENTAS MARCARON EL RITMO
Las tormentas obligaron a aplazar la primera jornada del US Open, con un líder desconocido, Andrew Landry (-4), que tuvo que pasar previas para llegar hasta la lista definitiva de participantes en el segundo Major del año. La suspensión del juego en la primera jornada, trastocó todos los planes de la organización y Landry, que tendría que haber jugado su segunda vuelta en la tarde del viernes, no pudo hacerlo y tuvo que esperar hasta la mañana del sábado. Lo mismo sucedió con Rafa Cabrera (+4) y Rahm (+6), que finalizaron el viernes a primera hora, su jornada del jueves, pero a los que no dio tiempo ni siquiera a salir al campo el viernes, Todo un lío que, si el tiempo no lo impide, podrá arreglarse el sábado 18, para que el domingo 19, la última ronda se dispute sin más problemas.
Jon Rahm, que se despide como amateur en el US Open, ya que será profesional a partir de la semana próxima, no empezó con buen pie, lo cual no es nada extraño, teniendo en cuenta que el campo es muy difícil, a pesar de la lluvia que dejó los greenes blandos y receptivos, y que solo trece jugadores, de los 156 participantes han podido ganarle al campo después de jornada y media.
En cuanto a los favoritos, Jordan Spieth, con solo una ronda disputada, es el 29 (+2), mientras Jason Day, a falta de tres hoyos para finalizar las dos vueltas, está (+5) en el puesto 56. Precisamente el +5 es el corte previsto para los jugadores que pasen el fin de semana.
El número 1 del mundo está en el filo de la navaja, mientras Phil Mickelson (+7), con solo dos hoyos por jugar para finalizar sus dos recorridos, tiene complicado pasar el corte, a no ser que la previsión del +5 no sea la definitiva, McIlroy (+7) y Fowler (+6) que juegan juntos, también lo tienen complicado, aunque les falta toda una ronda por jugar.
JON RAHM: DE AMATEUR A PROFESIONAL
A sus 21 años, el español lo ha ganado todo, o casi, en el terreno aficionado, en el que ha permanecido en primera posición del ranking durante 50 semanas. A sus triunfos en la competición deportiva, defendiendo los colores de Arizona State, se despide del campo amateur después de jugar el US Open, para el que se clasificó, precisamente como aficionado.
Llega el joven vasco, nacido en Barrika, a 23 kilómetros de Bilbao, con un impresionante palmarés cuyo resumen se puede hacer con solo decir que ha sido el jugador más destacado del año en la División I de la NCAA, y con el recuerdo de sus dos últimos trofeos: el premio Ben Hogan de esta temporada -también lo ganó en la pasada edición, y es el primer jugador que lo logra dos veces seguidas- y el premio Jack Nicklaus, que concede la Asociación norteamericana de Entrenadores de Golf.
«He estado trabajando en Arizona State junto a mi entrenador, Tim Mickelson (hermano de Phil), y a mi compañero, Ben Shur, que será mi caddie en Oakmont, dijo el vasco. Llevamos en Pittsburg desde el fin de semana pasado y hemos jugado el campo y creo que la experiencia que vamos a vivir será increíble”.
En Oakmont, donde debutará como amateur en el US Open, y se marchará como profesional, esperamos que el domingo 19, porque haya pasado el corte, Jon juega a las 07.40 de la mañana, por el tee del 10, acompañado por dos pros norteamericanos: James Hahn y Robert Streb.
Además del vizcaíno, otros dos españoles están en el tee de salida del complicado Oakmont C.C., Sergio García, que comparte partido las dos primeras rondas con Dustin Johnson e Hideki Matsuyama, y Rafa Cabrera que juega con J.B. Holmes y Kevin Chapell.
JORDAN SPIETH A REPETIR TRIUNFO
No está siendo esta temporada todo lo buena que el propio jugador quisiera. Claro que, tanto Jordan Spieth, número dos del mundo, como cualquier otro, siempre quiere más. Este año lleva dos victorias, pero también tiene que apuntarse malos resultados, sin pasar algún corte que debería haber superado. Spieth, defensor del título, es uno de los grandes favoritos, en un torneo, cuajado de figuras -están todos los que son- que tendrán que vérselas, como siempre en el US Open, con un campo muy difícil, preparado para esa gran ocasión que es el segundo Major del año, al que será complicado hacer birdies y que, como casi siempre, se ganará al par o sobre el par del campo.
Day, Spieth, McIlroy, Mickelson, Scott, Watson, Johnson… Todos van en busca de la gloria y de un bocado de esos 10.000.000 $ en premios, de los que el ganador se llevará 1.800.000 $.