Adam Scott (-6) regaló el Open 2012 a Ernie Els (-7) en el último hoyo de Royal Lytham. Jiménez, al par, en el top ten
El Open Championship de Royal Lytam rtuvo un desenlace cruel para Adam Scott (-6) que regaló el triiunfo a Ernie Els (-7), en la foto, que esperaba un play off en la Casa Club. Tiger fue tercero (-3) y Miguel Ángel Jiménez, al par, noveno.
Ver resultados y clasificación del Open Championship 2012
A la alegría de la victoria se opone siempre la tristeza de la derrota. En el caso del final del Open Championship 2012, finalizado el domingo 22 de julio en Royal Lytham & St Annes, fue más notoria la cruel imagen de la derrota del australiano Adam Scott, que la alegría de la victoria del sudafricano Ernie Els, que solo tuvo que esperar en la Casa Club para ver como se derrumbaban las ilusiones de Scott, líder desde el principio hasta el hoyo 17 y segundo tras el boogey con el que cerró su participación, brillante hasta ese momento cumbre, en el 141 Open Championship.
Como dicen los entendidos, los torneos se ganan o se pierden, salvo contadas ocasiones, en los últimos nueve hoyos. Y en esta ocasión la historia volvió a repetirse. Del tee del uno en la cuarta jornada, la del domingo 22, salía Adam Scott con -11 y Ernie Els con -5. Seis golpes de diferencia que no hacían presagiar nada bueno para el sudafricano, teniendo en cuenta, además, que entre los dos había otros nombres como los de Graeme McDowell, Brandt Snedeker o… ¡Tiger Woods!
Pero todo se desarrolló con la normal anormalidad de las últimas rondas. Mientras Ernie Els iba pian painito y llegaba al hoyo 10 sin perder sus opciones, Adam Scott también aguantaba el tirón y no cedía ante sus contrincantes. Uno de los primeros en descolgarse fue Tiger Woods, con un extraño triple bogey en el hoyo 6. A partir de ahí fue remando hasta llegar a los hoyos 13, 14 y 15 y se terminó de ahogar definitivamente con un 73 final y un total de -3, que le llevaba a empatar en el tercer puesto, con su compatriota y compañero de partido, Brandt Snedeker, el que tuvo un -10 en la segunda jornada para liderar con holgura el torneo.
Graeme McDowell también falló. Al llegar al hoyo 11, el segundo par cinco del recorrido, envió una bola al bosquecillo de la izquierda, y ni los gnomos del Royal Lytham pudieron encontrar la bola. Total, un bogey que le empezó a retrasar hasta dejarle en el hoyo 18, en la quinta plaza (-2), empatado con Luke Donald, el número 1 del mundo y el único de los tres primeros del ranking que ha dado la cara en este Open.
Así llegamos a los nueve últimos hoyos. Todo fue bien para Adam Scott, muy sólido y concentrado, con Steve Williams, el ex caddie de Tiger Woods como ayudante, hasta que llegó el primer boogey en el hoyo 15, tras una sacada de bunker que se fue lejos del hoyo. Y ahí empezó la debacle. Otro bogey en el 16, par 4 al que se llegaba con el driver, pero que Scott jugó conservador y terminó haciendo un bogey con el fallo de un putt corto. Y luego, otros dos bogeys en el 17 y el 18, que le llevaron del -10 que tenía en el 14, al -6 con el que acabaron sus ilusiones de ganar su primer Major.
Mientras, Ernie Els esperaba en la Casa Club, mejor dicho en el putting green, bebiendo refrescos y comiéndose un sandwich, además de hablar por teléfono y meter cuatro o cinco putts cortos sin demasiada prisa. El sudafricano había hecho los deberes y a su 36 de la primera vuelta, dos sobre par, añadió los cuatro birdies de la segunda, en los hoyos 10, 12, 14 y 18. De esta forma, Els firmaba una cuarta tarjeta de 68 golpes, dos bajo el par del campo, que unida a las de 67, 70 y 68 de los tres días anteriores, le convertían en el ganador de la Jarra de Clarete, por segunda vez en su vida -la anterior fue hace 10 años, en Muirfield, donde se celebrará el Open 2013- y en vencedor del cuarto grande en su ya dilatada carrera. A sus 42 años sumó su victoria profesional número 65 y sustituyó a otro veterano, Darren Clarke, vencedor del pasado año.
SIEMPRE NOS QUEDARÁ JIMÉNEZ
Por la razón que sea el caso es que Miguel Ángel Jiménez nunca falla, o casi nunca. No lleva un buen año, pero en el Royal Lytham se ha convertido en el mejor español y ha terminado al par, noveno en la clasificación general, empatado con otros nueve pros, entre los que se encontraban Vijay Singh, Ian Poulter o el veteranísimo Mark Calcavecchia, lo que le supone, aparte de un montón de euros, la clasificación para el Open Championship 2013 y el honor de haber superado a los seis compatriotas que empezaron con él la primera jornada, de los cuales solo otros tres pasaron el corte. Además, el Pisha es el único español que le ha podido ganar al campo y ahí están sus cuatro tarjetas para demostrarlo: 71, 69, 73 y 67.
Y eso, a pesar de la bondad con que los links de Royal Lytham, bien receptivos, y el clima del noroeste de Inglaterra, han acogido a los 156 jugadores que iniciaron el torneo el jueves 19. A pesar de esas "bondades" solo ocho terminaron bajo el par del campo y otros diez le pudieron empatar.
En cuanto a los otros tres españoles, sus resultados no han sido como para tirar cohetes, pero si nos conformamos con "haber pasado el corte" la cosa no va mal. Pablo Larrazábal acabó el 45 (+6); Fernández Castaño, el 54 (+7) y Rafa Cabrera Bello, que empezó con 70 golpes, terminó con un acumulado de +14, empatado con John Daly, amarga coincidencia, en la plaza 81, en la penúltima posición. El honor del farolillo rojo le correspondió al argentino Andrés Romero, que empezó, con 70 golpes, igual que Cabrera Bello, pero que finalizó con un desastroso acumulado de +18, en el puesto 83.
En cuanto a Westwood y McIlroy, otro Grande para olvidar. Mientras el número 2, McIlroy acababa el 60 (+8), el número 3 lo hacía en el puesto 45 (+6), empatados, entre otros, con Pablo Larrazábal.
Y por último, un recuerdo para Tom Watson que, con sus 62 años y su operación de cadera, no solo pasó el corte sino que terminó el 77 con un acumulado de +12. Gracias por seguir tan vivo y compitiendo pasada la sesentena.
Ver resultados y clasificación del Open Championship
(En la imagen, la Casa Club de Royal Litham & St Annes. Foto: archivo de Wikimedia Commons).
CRÓNICA DE LA TERCERA JORNADA
ADAM SCOTT, LÍDER DESTACADO
A falta de una sola ronda, el líder destacado del Open es el australiano Adam Scott, con once golpes bajo el par del campo, y cuatro de ventaja sobre sus dos perseguidores inmediatos, Graeme McDowell, con el que jugará la última ronda, y Brandt Snedeker, que no ha sabido mantener el liderato de la segunda ronda y disputará el partido estelar con Tiger Woods, cuarto clasificado (-6).
Dicen los británicos que al golf puede jugarse hasta con sol. Y eso es lo que hacen en el Royal Litham & St Annes, donde se disputa la edición 149 del Open Championship, antes British. Además, juegan sin viento con lo que el campo, par 70, es una bendición, al menos para los 17 jugadores que están bajo par, a falta de una sola jornada y de los otros siete que empatan con el campo.
Para los demás, incluidos los españoles, números negros. De los cuatro que quedan en juego, Miguel Ángel Jiménez es el mejor de todos, en el puesto 43, con +3. En el 54, empatan (+4) Pablo Larrazábal y Gonzalo Fernández Castaño, y el último lugar de entre nuestros compatriotas, el 76 de 83 jugadores que pasaron el corte, es para Rafa Cabrera (+7). Si nos conformamos con decir que "está bien que pasaran el corte", vale, pero si somos un poco más exigentes, diremos que el papel de los nuestros en este Open, sin viento y con sol, es más que papel, papelón.
Papelón también el de los tres primeros del ranking mundial: Luke Donald es el mejor, en el puesto 14, pero a diez golpes de Scott. Lee Westwood es el 54 (+4) y McIlroy, el 64 (+5). En la jornada del domingo, a intentar divertirse, al menos. Pero si juegan con el espíritu de Sergio García (Ver romance en esta misma página web) que no pasó el corte, como tampoco lo hicieron Alejandro Cañizares, Álvaro Quirós y santones como Phil Mickelson, mejor será que terminen la jornada a beneficio de inventario y se vayan al campo de prácticas.
Crónica de la segunda jornada
Sergio García no pasó el corte en el Open. Snedeker (-10), líder
Es un Open Championship atípico. Esta edición, la 149, del British, pasará a la historia por jugarse en un links, el Royal Litham & St Annes, que no era un links, aunque lo pareciera. Verde que te quiero verde, con las calles húmedas, los bunkers encharcados y los greenes que recogían las bolas en el mismo bote en el que caían, han convertido a este campo que vio dos veces el triunfo de Ballesteros, en una verdadera "madre".
Eso, añadido a la falta de viento, a la escasa lluvia durante las horas de juego, y a la temperatura que permitió a más de un jugador terminar en mangas de polo, hacen que este Open sea un tanto atípico y con un líder que ha sorprendido a todos, con diez golpes bajo el par 70 del campo, después de dos jornadas. Y es que el rubio Brandt Snedeker, con 31 años, natural de Nashville, en Tennessee, ha firmado dos tarjetas de 66 y 64 golpes y se ha convertido en un líder que puede continuar en los puestos de privilegio del torneo, si no se le tuercen las cosas.
La segunda posición (-9), a un solo golpe del norteamericano, es para Scott Adams, el australiano que ha hecho dos buenos recorridos (64, 67) y que no cede, por el momento.
Lo peor para los dos primeros es que tienen por detrás, en la tercera posición, nada más y nada menos que a Tiger Woods (-6). Sus dos recorridos de 67 golpes cada uno dicen bien a las claras las intenciones del californiano, que no deja nada a la improvisación y ha dejado el driver en su casa de Florida, y busca las calles con los hierros y los birdies aunque sea desde fuera del green. Y buen ejemplo de ello es el birdie del hoyo 18, un golpe mágico desde el bunker, uno de los pocos que no estaba encharcado, pero sí muy húmedo y desde el que ha dado un golpe que bien podría valer un Major. Tiger está a tres golpes. Cuidado con él. Además sale a jugar en el partido anterior al estelar y estará acompañado en la tercera jornada, por el joven danés de 22 años, Thorbjorn Olesen. El danés ya sabe lo que es ganar en el Tour Europeo. Lo hizo en Sicilia y en Royal Lytham está demostrando no tenerle miedo al Open Championship. ¿Se lo tendrá a Tiger el sábado? Lo veremos.
CUATRO ESPAÑOLES PASARON EL CORTE
De los siete españoles que acudieron al Royal Lytham, cuatro han pasado el corte y tres se han quedado en el camino. Una vez más, ha tenido que ser el veterano Pisha el que de una lección a sus compatriotas al colocarse el primero de ellos en la clasificación, en el puesto 28, al par total. Además, es el único de los siete que le ha podido ganar al campo (71 y 69) y lo ha hecho en la ronda del viernes.
Con Miguel Ángel Jiménez han pasado Rafa Cabrera Bello (+1), el 40, Gonzalo Fernández, el 41 (+2), empatados, entre otros con Rory McIlroy, y el 68, Pablo Larrazábal (+3) que empata en el límite del corte, con Lee Westwood.
Párrafo aparte merece Tom Watson (+3) que pasó el corte, a sus 62 años, con un putt de más de diez metros en el hoyo 18, en la segunda vuelta, que levantó a los miles de aficionados de sus asientos que no pararon de aplaudirle durante un buen rato. Todo un ejemplo.
Y también hay un párrafo aparte, éste negativo, a la actitud general de Sergio García que, una vez más, ha decepcionado a los aficionados españoles y a los muchos fans que tiene en todo el mundo y que, cada ves son menos. Sergio juega con una desgana que merece más un confortable sillón delante del televisor, que un campo de golf donde competir. El de Castellón no solo no se divierte cuando juega, sino que su cara es el reflejo del aburrimiento y del "dolor" que le produce un deporte que es el que le ha hecho multimillonario y con el que debería disfrutar, en lugar de sufrir permanentemente. Ni una sola sonrisa, ni un gesto amable, solo un ligero saludo cuando le aplauden algún buen golpe, que sabe darlos y muchos y una cara de resignación que solo se les ve a los empleados de la Oficina Siniestra que tienen que acudir todas las mañanas al tajo y aguantar a un jefe insoportable.
Si encima termina en el hoyo 18 haciendo un bogey con un putt relativamente sencillo lo que le deja fuera del corte, mientras su compañero de partido, Tiger Woods, la emboca desde el bunker, pues apaga y vámonos. Y quizás debía ser eso lo que hiciera Sergio, al menos temporalmente. Desde luego, así es difícil que se clasifique para el equipo de la Ryder. Y con esa actitud, seguro que Chema no va a contar con él para sus dos elecciones dedísticas.
Como tampoco va a contar Olazábal con Álvaro Quirós, que se despide del Open Championship con un +11 desastroso y con la sensación de que ha perdido el tren del equipo de la Ryder. El tercero de los españoles que no pasó el corte fue Alejandro Cañizares: el madrimalagueño, que logró clasificarse en una de las previas, no ha conseguido su objetivo de terminar el torneo en el fin de semana.
CRÓNICA DE LA PRIMERA RONDA
Adam Scott (-6), primer líder del "British" en Royal Litham. Ningún español pudo ganarle al campo
De los siete españoles que han iniciado el jueves 19 de julio, el 141 Open Championship, ninguno de ellos ha podido ganar a los links del Royal Litham & St Annes, donde Seve levantó dos veces la Jarra de Clarete, símbolo del vencedor. Claro que aquellos eran otros tiempos. Ahora, todo es diferente. Hasta el tiempo. Y no creo que tenga nada que ver el cambio climático, pero el viento, que es elemento natural en todos los links, situados al borde del mar, en este caso al noroeste de Inglaterra, brilló por su ausencia durante toda la jornada, y no parece que vaya a soplar demasiado en las próximas jornadas.
A pesar de esa ausencia de Eolo y de la blandura de los greenes, que recibían como grandes amigas a las bolas que les llegaban, los españoles no pudieron terminar bajo el par del campo, y solo uno de ellos, Rafa Cabrera, consiguió empatarle con su vuelta de 70 golpes, lo que le deja en el puesto 35, junto a otros 18 compañeros, entre ellos el número 1 del mundo, Luke Donald, que firmaron igualmente una vuelta al par.
Por delante de ellos, 34 jugadores permanecen bajo par, lo que ya es una novedad en un Grande como el British, donde las primeras rondas se suelen caracterizar por los bajos resultados de los participantes. Este año, en Royal Litham, el primer líder es el australiano Adam Scott, el que lleva el caddie que acompañó a Tiger durante los 14 Majors que conquistó. Scott (-6) tiene tras él a tres jugadores a un solo golpe: Paul Lawrie, ganador del Open en Carnoustie, cuando Van de Velde se lo regaló, Zach Johnson y Nicolas Colsaerts.
La quinta posición es para otro norteamericano, Brandt Snedeker (-4) y tras él, un nutrido grupo de ocho jugadores, empatados (-3) entre los que figuran Tiger Woods, Rory Mcilroy, Bubba Watson, Graeme McDowell y Ernie Els.
Tras ellos, y hasta 34 jugadores le han ganado al campo y ya, a partir del puesto 35, figuran los que han firmado 70 golpes, al par del campo, diecinueve participantes entre los que se encuentra el mejor español, Rafa Cabrera Bello.
EL RESTO DE LOS ESPAÑOLES
Con +1, en el puesto 54 finalizaron la primera jornada Miguel Ángel Jiménez y Gonzalo Fernández Castaño, empatados junto a otros, con el veterano Tom Watson. Ya fuera del posible corte, que sería el +1, el 79 aparece Sergio García (+2), que no parece estar muy a gusto en el campo, y menos si juega con Tiger Woods.
En el puesto 100 está Pablo Larrazábal (+3), empatado con Lee Westood y Phil Mickelson y en el 116, Alejandro Cañizares y Álvaro Quirós (+4).
En las últimas plazas se encuentran dos grandes jugadores venidos a menos. Darren Clarke, defensor del título, que es el 144 (+6) y Martin Kaymer, que con +7, el 150, tiene muy difícil continuar el fin de semana en Royal Lytham.
Ver horarios de salida del viernes 20 en el Open Championship
CRÓNICA PREVIA
El Open vuelve a Royal Litham (19 – 22), donde Seve se coronó dos veces. Tiger Woods juega con Sergio García y Justin Rose
Severiano Ballesteros conquistó en tres ocasiones la Jarra de Clarete, símbolo del vencedor del Open Championship, más conocido popularmente como el British. Dos de ellas fue en el Royal Litham & St Annes Golf Club, en 1979 y 1988 y la tercera en St Andrews en 1984.
Este año el Open por antonomasia vuelve a Royal Lytham & St Annes Golf Club. El club fue fundado en 1886 y el recorrido actual diseñado en 1897. La Casa Club celebró su centenario en 1998. En este campo se han jugado diez British, dos Copas Ryder y muchos otros torneos de importancia.
Royal Lytham está situado en Lancashire, al noroeste de Inglaterra, el campo se juega como par 70 y tiene 6.479 metros. Los jugadores no tendrán demasiadas dificultades con el clima ya que, para la zona, los meteorólogos dan lluvia solamente el jueves, con nubes el viernes y el domingo y nubes y claros, el sábado. El viento, que es el enemigo público número 1 de los links parece que no será demasiado fuerte.
Así las cosas, ya están preparados los partidos del jueves 19. La competición la abrirá un veterano inglés, Barry Lane, al que acompañará James Driscoll, nada menos que a las 06.19 de la mañana. Una hora rara sí, pero lógica teniendo en cuenta que la ha puesto un inglés.
Jugarán de tres en tres, hasta completar 53 partidos y 157 jugadores, ya que los dos primeros partidos de la mañana saldrán con solo dos profesionales.
Tiger Woods, que lleva desde el pasado fin de semana entrenando en Royal Litham, jugará a las 09.42, con Sergio García y Justin Rose.
Los otros seis españoles que están en liza, jugarán: Rafa Cabrera con Stewart Cink y Johnson Wagner; Alejandro Cañizares con Jeev Milkha Singh, reciente ganador del Open de Escocia, y Greg Chalmers; Miguel Ángel Jiménez con David Duval y Raphael Jacquelin; Pablo Larrazábal, con Tom Lehman y Greg Owen; Fernández Castaño, con Simon Dyson y Harris English, y por último, Álvaro Quirós con Joh¡nathan Byrd y SM Bae.
Otros partidos de interés son los de Phil Mickelson con Luke Donald y Geoff Ogylvy; Lee Westwood con Joshinori Fujimoto y Bubba Watson, y Rory McIlroy con Louis Oosthuizen y Keegan Bradley.