Phil Mickelson (-17) destrozó a Tiger Woods (-8) en el AT&T Pebble Beach, en California
El zurdo Phil Mickelson, en la foto, con una tarjeta de 64 golpes en la última ronda, destrozó a Tiger Woods en el AT&T Pebble Beach, que finalizó en California el domingo 12 de febrero.
Phil Mickelson parece que juega al golf como los lagartos. Permanece aletargado durante un cierto tiempo y, de repente, se convierte en un feroz cocodrilo que se zampa a todos sus rivales. Y eso hizo en la cuarta jornada del AT&T Pebble Beach, que finalizó el domino 12 de febrero, un torneo formato Pro Am, de los más famosos del PGA Tour, que se disputó en tres campos de la Peninsula de Monterey, al sur de San Francisco, en California.
Mickelson, con 64 golpes el domingo, ocho bajo el par de Pebble Beach, se merendó a todos sus rivales y, viniendo desde la cuarta posición, con nueve golpes bajo par, se subió hasta el podio y, gracias a sus seis birdies y un eagle en el hoyo 6, se colocó con un -17 que fue imposible de superar por parte de Charlie Wi, el coreano que había liderado el torneo desde el jueves hasta el sábado, pero cuyos -15 finales no fueron suficientes para detener a la apisonadora zurda que, a sus 41 años, consiguió en California, su título número 40 en el Circuito de la PGA americana.
Y si Charlie Wi se vio impotente ante la avalancha de juego y de resultados de Mickelson, peor fue lo de Tiger Woods (68, 68, 67 y 75) que partía tercero (-11), a cuatro golpes de Wi y con dos de ventaja sobre Mickelson. A mayor pena de Tiger, Mickelson y él eran compañeros de partido. Y a principio de la vuelta, todo parecía ir de cara para el ex número 1 del mundo. Sin embargo, el putt de Woods empezó a temblar y en la primera vuelta terminó con tres bogeys consecutivos, para 38 golpes, mientras Mickelson no solo le recuperaba los dos golpes que tenía de ventaja, sino que se ponía, con sus 31 golpes, con cinco de ventaja sobre su gran rival de antaño… y de ahora.
Nada importaba que Charlie Wi no resistiera el ataque de Mickelson y acabara segundo (-15), ni que Ricky Barnes estuviera rondando por las alturas, para terminar tercero (-13). Toda la atención estaba puesta en el partido de Tiger y Mickelson y, sobre todo, en la irresistible ascensión del zurdo, y la inevitable caída del diestro. Y la cosa no mejoró nada para el otrora gran campeón. Con 37 golpes en la segunda vuelta, frente a los 33 de Mickelson, Tiger terminó hundido (es un decir) en el puesto 15 (-8), a nueve golpes del brillante vencedor, que se fundió en un abrazo con su mujer al terminar el torneo, mientras Tiger no tenía ningún hombro en el que llorar.
EL FORMATO PRO AM
Este torneo es muy popular dentro del calendario americano, ya que en él participan personajes conocidos, al jugarse en formato Pro Am. Tiger Woods, por ejemplo, tenía como pareja a Tony Romo, en la foto inferior, quarterback de los Dallas Cowboys y handicap 0: En el tee de salida también se encontraban el actor Bill Murray, siempre con ropa estrafalaria, o el músico Kenny Gee, entre otros.
El campeonato se disputó en tres campos diferentes en Pebble Beach (California), en la Península de Monterey: el Pebble Beach Golf Links, par 72; el Spy Glass Hill Golf Couse, par 72 y el Monterey Peninsula Golf Course, par 70. Los tres tienen un recorrido de alrededor de 6.200 metros y la última ronda se celebra siempre en Pebble Beach Holf Links. En la zona, el actor Clint Eastwood es muy popular, ya que fue alcalde de la localidad de Carmel y es un experto jugador de golf, aunque ya no se le ve mucho en torneos. Es, además, presidente de la Fundación Península de Monterey. El AT&T californiano repartía 6,4 millones de dólares en premios, de los que 1.152.000 han sido para el ganador, Mickelson.
CRÓNICA PREVIA
Tony Romo, quarterback de los Dallas Cowboys, compañero de Tiger Woods en Pebble Beach (9 – 12 de febrero)

(Las imágenes de Dustin Johnson y Toni Romo pertenecen al archivo de Wikimedia Commons)