Larrazábal y Otaegui (-4), quintos en Qatar, a tres golpes de Ewen Ferguson

0

Pablo Larrazábal (en la foto) empató (-4) con Adrián Otaegui, en la quinta posición del Commercial Bank Qatar Masters, Los dos terminaron a solo tres golpes del ganador, el escocés Ewen Ferguson.

Ewen Ferguson (-7) fue el ganador, tras dos últimas jornadas con fuertes vientos, del Commercial Bank Qatar Masters, torneo del DP World Tour, que repaartía 2.000.000$ en premios, que finalizó el domingo 27 de marzo, en el Doha C.C (par 72), y en el que solo 34 de los 75 jugadores que pasaron el corte del viernes, pudieron ganarle al campo.

El escocés, de 25 años, terminó con un golpe de ventaja sobre el norteamericano Chase Hanna. En la quinta posición empataron (-4) Pablo Larrazábal y Adrián Otaegui.

LARRAZÁBAL Y EL «EFECTO MARGARITA»

Larrazábal era líder del Commercial Bank Qatar Masters (-10) hasta el hoyo 11 del Doha C.C (par 72), en la tercera ronda, el sábado 26 pero, siguiendo con la teoría del «Efecto Margarita» -ver bajo estas líneas- en esta ocasón fue un recorrido si, un recorrido no. Tras la primera vuelta del sábado 26, el español tenía en su tarjeta 35 golpes, uno bajo el par del campo y en los siguientes nueve hoyos, con bogeys en el 11, 12, 13, 17 y 18, cayó en picado para firmar 75 golpes (+3), que le alejan dos golpes de la cabeza, en la que empatan (-8) el inglés Matthew Jordan y el polaco Adrian Meronk que cada vez se acerca más a su primer triunfo en el DP World Tour.

Con su -6 acumulado Larrazábal empataba en la cuarta posición con Adrián Otaegui, Wilco Nienaber y Chase Hanna. A falta de 18 hoyos, tanto Pablo como Adrián tenían todas las posibilidades de victoria; en el caso de Larrazábal, sus 40 golpes en los últimos nueve hoyos de la tercera ronda, la jornada del movimiento como la llaman los jugadores, deberá dar paso a una tarjeta totalmlente distinta el domingo.

Si no, tendrá que ser el vasco Otaegui el que intente el triunfo, por una vía totalmente distinta a la de Larrazábal. Porque el «Efecto Margarita» es totalmente compatible con la Operación Equilibrio a la que se suma Adrián. Otaegui ha firmado tres tarjeras de 70 golpes cada una, para un acumulado de -6; no se puede ser más regular, en el buen sentido de la palabra. Lo malo es que regular, no es solo ese equilibrio, esa estabilidad de jugar siempre igual, también es sinónimo de normaliad y lo normal, en golf, no suele ser suficiente para obtener una victoria.

LARRAZÁBAL, LÍDER TAMBIÉN EN LA SEGUNDA RONDA

Aunque en la segunda jornada del Commercial Bank Qatar Masters que se disputa (24-27 marzo), en el Doha G.C. y que reparte 2.000.000$ en premios, Pablo Larrazábal solo ha podido ganarle por un golpe al campo, el español (64, 71) sigue liderando la prueba, aunque con solo un golpe de ventaja sobre el trío que empata en la segunda posición: el norteamericano Chase Hanna, el sudafricano Wilco Nienaber y el polaco Adrian Meronk.

La segunda tarjeta del catalán ha sido una mezcla de aciertos y errores que, afortunadamente, logró controlar al final de la jornada: tres bogeys y un doble bogey en la primera vuelta, con un solo birdie, que compensó con un eagle y otros tres birdies en la segunda, para un acumulado de -1 bajo el par 72 del Doha C.C.

Pablo Larrazábal ha elevado un escalón más el «Efecto Margarita» (uno sí, uno no), que no es otra cosa que trasladar al golf el clásico juego de la margarita y deshojar la flor para saber, por ejemplo, «si me quiere o no me quiere». En el caso del deporte, el «Efecto Margarita» se traduce así: un golpe sí, un golpe no; un hoyo sí, un hoyo no; un día só, un día no… de esta forma se puede seguir deshojando mentalmente la flor, hasta llegar, por ejemplo al «un torneo sí, uno no» que es lo que hha hecho Pablo Larrazábal, tras sus dos primeras rondas en el torneo de Qatar.

El español, que dio en dos semanas, la de cal y la de arena, con victoria en Sudáfrica primero y sin pasar el corte, también en Sudáfrica, después, ha entregado sus credenciales -léase tarjeta- para un nuevo triunfo en el DP World Tour, solo quince días mas tarde. Ya tenemos el «efecto» de un torneo sí, un torneo no; pero es más después de dos jornadas, se confirma el «Efecto Margarita», con los resultados de jueves (64) y viernes (71). Esperemos que siga la racha y el sábado, la tarjeta de Pablo vuelva a ser similar a la del primer día.

SOLO CINCO ESPAÑOLES PASARON EL CORTE

Una docena de españoles iniciaron este Commercial Bank Qatar Masters, en el que hay muchos jugadores de la clase media y media alta del DP World Tour, entre ellos esos doce españoles, de los cuales solo cuatro, además del citado Larrazábal, pasaron el corte del viernes 25. Adrián Otaegui (-4) es, decimosexto, el segundo de los hispanos; en el puesto 24 aparece (-3) Carlos Pigem; Nacho Elvira y el incombustible Jorge Campillo son los otros dos españoles que estarán presentes el fin de semana, ya que acabaron las dos primeras rondas al par, empatados con los quince jugadores que cierran la clasificación.

Los otros siete españoles no pudieron pasar un corte establecido, precisamente, al par y que superaron 75 jugadores. Pep Anglés, Ángel Hidalgo, Santiago Tarrío y Alfredo García Heredia (+1) se quedaron fuera por un solo golpe; Adri Arnáus (+3) y Alejandro Cañizares (+6) se habían quedado sin opciones tras la primera jornada y Gonzalo Fernández Castaño emuló a Larrazábal con lo del «Efecto Margarita», pero en negativo: el madrileño firmó dos vueltas tan dispares (82 y 73 golpes) y acabó empatado (+11) con otros tres jugadores en el puesto 31 que cerraba la tabla… si exceptuamos a un amateur catarí que se fue a su casa (+25) con el mal sabor de boca que deja llevarse el farolillo rojo. Tras él, cinco jugadores se retiraron.

Con varios meses de anticipación al mundial de fútbol, que se juega en Qatar, el pequeño país de la península arábiga, que no llega a los tres millones de habitantes, dos millones de los cuales son inmigrantes, recibía a los golfistas del DP World Tour -doce de ellos, españoles- para disputar un nuevo torneo del antes Circuito Europeo y que compite en fechas con el WGC Championship Dell Technologies (23-27) que se disputa, en formato match play (eliminatorias) en Austin, Texas, donde 64 de los mejores jugadores del mundo luchan por un total de 12.000.000$ en premios.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *